miércoles, 13 de octubre de 2010

EN PELIGRO DE EXTINCIÓN


Esta última semana ha sido bastante agitada, el desastre en Haití ha sido la noticia más sonada y la más terrible de lo que va del año, increíble que le haya tocado algo así a un país hermano tan miserable; le dedico este primer párrafo a las víctimas de Haití, víctimas del terremoto, víctimas de la pobreza, de la ignorancia y de la historia. Ojalá la comunidad internacional les sea de ayuda hoy más que nunca.

Después de esa pequeña introducción, pasemos a otra tragedia que está aún más cerca de nosotros que Haití. México se ha convertido en el país más peligroso para los periodistas en América latina.

Simple y verdaderamente preocupante, en la exhibición pasada hablé sobre la libertad de expresión, honestamente el problema, no sólo de los mexicanos sino de los humanos, es nuestro poco entendimiento y control sobre las cosas que nosotros mismos establecemos: ni nosotros nos entendemos.

Todo ser humano sobre la tierra (claro en un mundo ideal) tiene derecho a decir y publicar lo que quiera, ahora el problema no es la discriminación, sino la lucha de poderes, la corrupción y la impunidad; esta claro aquí que el efecto es completamente diferente al de las agresiones hacia homosexuales, ahora el atacado es quién dice.

El crimen hacia los periodistas aumentó de seis asesinatos al año en 2008 a 10 en 2009, por supuesto en 2008 se creó el Frente Nacional de Periodistas por la Libertad de Expresión y ha exigido el esclarecimiento de los últimos 13 asesinatos del año pasado y sobre todo los 57 que van desde 2000 más ocho desaparecidos*.

La situación se complica mucho más ya que los periodistas víctimas de homicidios, son normalmente los que cubrían notas relacionadas con el narcotráfico y situaciones policiacas, como es de esperarse jamás se sabrá quién fue el responsable, las autoridades se hacen las que no ven, la impunidad gobierna las calles de nuestro país y las bocas se mantienen bien cerradas.

Entre que las autoridades están coludidas y vivimos en los tiempos del “no pasa nada”, los periodistas prefieren no firmar notas y así cuidarse de la boca del lobo, ya que al final quien los juzga de buenos y malos no es la sociedad, sino el crimen organizado como conveniente y no conveniente.

No les pondremos a todos esos muerto un lazo de mártires, en realidad no sabemos qué es exactamente lo que hacían, o sea, todo ser humano es corrompible, pero sí debemos poner mucha atención al significado que tiene la violencia hacia los comunicadores, ya que son generadores de opinión pública y tienen su alcance un micrófono o un pluma para llevar muchas voces de la sociedad civil.

Así que cuidado quien quiera ser periodista porque si seguimos como hasta ahora: los que lo intentamos estamos en peligro de extinción, aunque con la violencia hasta hoy registrada, todos lo estamos.

*http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2010/01/01/mexico-nacion-de-alto-riesgo-para-periodistas-ante-inaccion-del-estado

http://www.elsemanario.com.mx/news/news_display.php?story_id=15360

lunes, 11 de octubre de 2010

SOBRE LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN



En lo que va del año la polémica ha sido sobre la aprobación de los derechos de los homosexuales, ¡que sí!, ¡que no!; pero uno de los comentarios más criticados fue el de Esteban Arce, conductor del programa “Matutino Express” de Televisa, durante una entrevista con su invitada sexologa expresó su opinión sobre las relaciones lesvico-gays y su derecho a formar una familia.

La verdad, lo único que demostró este señor es su ignorancia y su nulo respeto a una experta en el tema, que por cierto, ¡era su invitada! En su conversación dijo que no era natural ese tipo de relaciones y no dejó hablar a la sexóloga que abogaba por la tolerancia ante las preferencias, pero no pudo terminar: el titular del espacio la calló con un corte comercial.

Ahora los homosexuales están pidiendo su salida del espacio por homofóbico e intolerante, pareciera que ya no se puede decir lo que se piensa, para nada defiendo a este individuo, pero sí creo que la razón no es lo suficientemente fuerte como para desaparecer su imagen del medio, creo que debería salir por ser ignorante, por olvidar que un periodista se caracteriza por ser objetivo y por irrespetar a su invitada

Digo lo anterior porque es cierto que su opinión resultó ser ofensiva, intolerante y reflejo de una persona mal informada pero es parte del derecho de la cualquier persona decir lo que piensa: ¡libertad de expresión!, la problemática surge cuando otros se sienten discriminados por el hecho.

Cito textual el artículo 6° de nuestra Constitución: “La manifestación de ideas no será objeto de ninguna inquisición judicial o administrativa, sino en el caso de que ataque a la moral, los derechos de tercero, provoque algún delito, o perturbe el orden público(…)”. Lo anterior protege a Esteban Arce en cualquier comentario que haga, la verdadera problemática surge cuando terceros se sienten atacados y ofendidos.

La pregunta clave aquí es: ¿Dónde termina nuestra libertad de expresión y donde comienza la discriminación hacia otros?, complicado… No debemos coartar la libertad de absolutamente nadie, pero tampoco podemos agraviar al otro.

Yo estoy a favor de que este sujeto no vuelva a decir nada en ningún lado, no está preparado para dar su opinión, primero debería a ponerse a estudiar algo más que la Biblia, sin embargo lo más adecuado en este caso es que presente públicamente un disculpa real ante los medios de comunicación y en su programa televisivo para los homosexuales y otra más para la sexóloga que también salió insultada en el “debate”.

Tal vez no sea una solución absoluta, pero creo que es bastante castigo ridiculizarlo en todos los medios posibles. Tampoco nos olvidemos que no es el único ignorante e hipócrita, el día de hoy se publicó en La Jornada* el comentario del Cardenal Norberto Rivera sobre el tema: “Perversa toda ley que se oponga a Dios(…) No podemos obedecer a los hombres ante esta inmoralidad”, olvidándose ¡claro! de Marcial Maciel o de los sacerdotes católicos pederastas. “Ellos no son ‘perversos’, sólo obedecen a las leyes de la naturaleza”

Mi punto: los que son hipócritas, derechistas o ultra conservadores siempre abusaran de la libertad de expresión, lo que usted, querido lector, debe hacer, es ser crítico, tolerante e informado, así no dejara llevar por los poco acertados comentarios de los menos conscientes.

*(La Jornada, 11-ene-10, Elizabeth Velasco C.)